Isco, una recuperación sin prisas en el Betis

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El año pasado, Isco sufrió dos lesiones significativas que afectaron su rendimiento y el de su equipo. La primera, de índole muscular, lo mantuvo fuera de los campos más de un mes a principios de año; la segunda, una lesión ósea, le impidió participar en las etapas decisivas de la temporada. Estos contratiempos no solo afectaron su contribución en el campo, sino que también dejaron al equipo sin uno de sus principales referentes ofensivos, lo que tuvo como consecuencia la eliminación del Betis de la Conference League y el no lograr clasificarse para la Europa League.

Continúa la recuperación bajo supervisión

Tras un incidente en un encuentro frente a Las Palmas, donde recibió una patada que resultó en una fractura en el peroné de su pierna izquierda, Isco tuvo que ser operado. Esta lesión le costó perderse la Eurocopa, donde se esperaba fuera una pieza fundamental para la selección española. Aunque la recuperación avanza a buen ritmo y el jugador muestra mejoría, desde el club prefieren no apresurar el proceso. "Todo va según lo previsto con Isco, continúa con sus dobles sesiones y, gracias al esfuerzo de nuestros médicos, todo marcha en tiempo. No tenemos prisa, queremos evitar cualquier recaída", comentó Manu Fajardo, director deportivo del club, en una reciente rueda de prensa.

El proceso de rehabilitación del jugador ha incluido periodos con una férula protectora y sesiones intensivas de fisioterapia. A pesar de su progreso, Isco aún no ha podido reincorporarse al trabajo con el grupo y no participó en la pretemporada del equipo en Austria. Se mantuvo en Sevilla, trabajando en su recuperación junto a otro compañero lesionado, Bakambu, y está pendiente de saber si se unirá a la gira del equipo por Estados Unidos este verano.

Un regreso cauteloso pero esperanzador

Inicialmente, los médicos estimaron un periodo de convalecencia de aproximadamente tres meses desde mediados de mayo, lo que sugería que Isco podría perderse las primeras jornadas de la Liga. Su evolución en las próximas semanas será determinante para saber si estará listo para el arranque de la temporada contra el Girona, o si su retorno deberá esperar hasta fechas posteriores, como la segunda jornada de Liga o incluso el playoff de la Conference. En Betis, la paciencia es clave, pues Isco no solo es visto como un jugador crucial, sino como un elemento clave del proyecto futuro del club.