Pere Milla de héroe a villano en el Elche

Cómo están las cosas

Bajan las aguas revueltas por el Martínez Valero porque una de sus piezas más caras y emblemáticas de los últimos tiempos declara su marcha unilateralmente y el club con el que se hizo un nombre en la élite futbolística patria alega que le queda un año más de vinculación.

Las discrepancias a grandes rasgos consistirían en la interpretación sobre la aplicación de una cláusula contractual que para la entidad supone la renovación automática por un año más y la cual según los asesores del atacante no sería efectiva al no darse todos los condicionantes en ella estipulados.

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Pere Milla
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Incierto futuro

Como suele suceder en estos casos la incerteza legal es absoluta y no apostaríamos a día de hoy por una solución rápida e inequívoca si llegara el caso a los tribunales ordinarios, pero sí que la experiencia dicta que quizás tenga más que perder el jugador con esta incertidumbre ya que por la parte social, el aficionado siempre tiende a defender los colores por encima de todo y de todos, dejándole en una situación harto incómoda si al final tuviera que quedarse y en lo tocante al futuro deportivo, el club tiene alternativas como se vio al final de la temporada pasada y el jugador no se puede arriesgar a quedar marcado por un proceso jurídico abierto que espantaría a sus posibles pretendientes entre los que se contaban clubes como el Espanyol y el Valencia.

Famoso precedente

Cabría recordar aquí un sonado caso reciente como el de Messi en el que todo un sextuple ganador del Balón de Oro tuvo que recular después de anunciar su marcha ante el desacuerdo con el club en la interpretación de su contrato y quedarse en Barcelona un año más contra su voluntad a pesar de tener otras intenciones.

El ilerdense públicamente sólo ha tenido palabras de agradecimiento para club y afición pero no así para con sus dirigentes

Siento escribir estas líneas, pero me toca hacerlo. Por el momento, es hora de despedirme de la que es mi casa. La que ha sido y la que considero que es mi casa

Resolución del caso

Como dicta el sentido común, y no solo en este caso, siempre es mejor un mal acuerdo que un buen juicio y suponemos y esperamos que al final se imponga la lógica y trabajador y propiedad lleguen a un acuerdo antes de que llegue la sangre al río, aunque mientras tanto, unos y otros parecen decididos a tensar la cuerda lo máximo posible con todo el espéctaculo que ello conlleva y al que estaremos bien atentos.